Aunque el invierno no es la época más activa para disfrutar de tu piscina, es esencial mantener el agua en condiciones óptimas durante estos meses de inactividad. Un buen mantenimiento en invierno garantiza que, cuando llegue el calor, tu piscina esté lista para ser disfrutada nuevamente.
- Pasar el limpia fondo una vez cada 15 días: Para eliminar la suciedad depositada en el fondo de la piscina, y recircular el agua al menos una vez por semana, para oxigenarla
- Equilibrar el PH del agua de la piscina: Mantener siempre el nivel de PH entre 7.2 y 7.6. El PH se puede verificar fácilmente con un Kit Laboratorio, tomando una muestra de agua directo de tu piscina. Este control permite escoger tratamiento adecuado para llevar la piscina al nivel correcto.
- Aplicar productos químicos: tratamiento de cloro y alguicida al menos una vez al mes durante todo el invierno. La dosificación dependerá de la capacidad de agua de la piscina
- Colocar cobertores: Hay de varios tipos, y evitan la caída de hojas e insectos, pero también el congelamiento del agua. Si la piscina no tiene cobertor, es importante recoger las hojas de la superficie de manera regular para evitar que el agua se ensucie o que terminen en los mecanismos de la bomba.
- Revisión periódica del sistema de filtrado: Chequear regularmente todos los elementos que componen el sistema de filtrado, para asegurarnos de su correcto funcionamiento: canasta de skimmer, pre- filtro de la bomba, filtro de arena/cuarzo, etc.
Siguiendo estas recomendaciones, vas a mantener el agua de tu piscina en excelentes condiciones durante el invierno, lo que no solo protege tu inversión, sino que también te ahorra tiempo y esfuerzo cuando llega la temporada de verano.